Esta articulo fue originalmente publicado por Audrey Dutton de Idaho Statesman.
Uno de los hospitales más grandes de Idaho se ha visto tan fuertemente afectado por el aumento de casos de COVID-19 que se vio obligado este fin de semana y el pasado a enviar pacientes a otro lugar.
El hospital St. Luke’s Magic Valley en Twin Falls entró en una fase de remisión de pacientes durante 12 horas el fin de semana del 31 de octubre y durante 12 horas al comienzo de este fin de semana. Esto significa que no podía aceptar pacientes que venían transferidos de otros hospitales, y tampoco tenía espacio para pacientes que llegaban necesitando atención médica.
Se remitieron cuatro a cinco pacientes cada fin de semana a otros hospitales, principalmente en Treasure Valley, según representantes de St. Luke.
El hospital de Twin Falls ha recibido entre 44 y 52 pacientes con COVID-19 a diario desde Halloween, según los datos de coronavirus disponibles en el sitio web de St. Luke. Un estimado del 31% de todos los pacientes del hospital tenía el virus, según los datos.
El viernes hubo 310 personas hospitalizadas con COVID-19 en todo el estado el viernes, según datos federales recopilados de los hospitales de Idaho.
Con la propagación del virus en Magic Valley, algunos de los empleados de emergencias del hospital se han enfermado o están en cuarentena.
“Se necesita mucha gestión, se requiere mucho esfuerzo; hay que llamar a las enfermeras y rogarles que trabajen turnos adicionales”, señaló el Dr. Joshua Kern, vicepresidente de asuntos médicos de St. Luke’s Magic Valley, Jerome y Wood River al Statesman el mes pasado. “Volvemos a preguntarnos, ¿cuánto tiempo se puede sostener esto? ¿Durante cuánto tiempo podremos brindar la atención médica de alta calidad que brindamos?”
St. Luke’s Magic Valley dejó de realizar cirugías electivas el mes pasado y comenzó a enviar a la mayoría de sus pacientes pediátricos al hospital infantil en Boise. Ambas determinaciones estaban destinadas a liberar al personal a medida que llegaban más pacientes con coronavirus al hospital.
Ese mismo escenario, más personas que necesitan atención médica, con personal limitado, se está presentando en todo el estado y en las regiones de Mountain West y Midwest.
Los hospitales de Idaho, grandes y pequeños, han advertido que la actual racha récord de nuevos casos de coronavirus en Idaho dará como resultado más hospitalizaciones en las próximas semanas. Si bien los hospitales aún pueden atender a los pacientes o transferirlos a hospitales con camas disponibles, cada vez es más difícil encontrar espacio.
Los hospitales de Idaho se han apoyado en la posibilidad de enviar pacientes a otros estados como Utah y Montana, pero esos estados también están al límite.
Los hospitales de St. Luke en Treasure Valley actualmente tienen suficiente capacidad, según el sistema de salud.
Los hospitales del sistema de Boise, Nampa y Meridian recibieron un total de 51 pacientes con COVID-19 el sábado, de un total de 368 pacientes.
“No tenemos planes en este momento de cancelar cirugías electivas en Treasure Valley”, dijo Anita Kissée, gerente de relaciones públicas del Sistema de Salud de St. Luke. “Hay otras formas de continuar trabajando para, primero, flexibilizar la capacidad en todos los sitios primero. Esperamos no tener que volver a repetir lo que hicimos a principios de año porque sabemos que las personas necesitan esas cirugías o procedimientos. Dicho esto, todo depende de la cantidad de pacientes que necesiten hospitalización, pero en este momento no hemos llegado al punto de necesitar detener ciertas cirugías electivas como está sucediendo en Magic Valley”.
En su reunión el lunes, el Ayuntamiento de Twin Falls aplazó la decisión sobre el mandato de mascarillas.
Esta historia fue traducido por Clorinda Zea.